lunes, 10 de octubre de 2011

SIGUIENTE CONTINUACIÓN DE LA HISTORIA "HILO ROJO DEL DESTINO " BY LULAI Y LUEGO LE TOCA CONTINUARLA A SUSAN (Blueberry)

---Fragmento anterior---

"- ... Entiendo... -murmuró el inspector, escribiendo de nuevo algo en la libreta. Me llevé las manos a la cabeza, la había cagado-. Voy a hacerte una última pregunta, una pregunta un tanto complicada, pero que necesito que contestes todo lo que sepas. ¿Qué puedes decirme sobre Carla?.

"¿Que qué?". Me quedé completamente a cuadros. Miré a mi madre, quién asintió para que respondiera. Y yo... ¿qué podía decir?. Me sentí estúpida. Sentía que iba a traicionar el secreto que habían estado guardando todo este tiempo. Entonces... entonces una lucecita se encendió en mi cabeza. Y supe exactamente quién había sido el asesino. 

-¿Caroline?, ¿puedes responder a la pregunta, por favor? -insistió Bennett. Me miró con sospecha. Como si pudiera leerme la mente."


---Continuación by Lulai---



-No sé nada de esa tal Carla -aseguré decidida a no romper la confianza de Roberto ni de la misma Carla. 

-¿Estás segura? -el inspector mantuvo su mirada inquisidora sobre mí, pero yo logré mantener la calma y no ponerme nerviosa a la vez que asentía-. Espero que estés diciendo la verdad, Caroline. 

-Si -sentí que mi madre también estaba pendiente de mi, como intentando averiguar si mentía o no. Tenía la tentación de voltear la cara para que no me viese, pero eso sería confirmar las sospechas de ambos, por lo que en cambio hice una pregunta-. ¿Puedo ver a Roberto?. 

-Mmm... No creo que sea lo correcto en estos momentos dado que es sospechoso de algo muy grave, jovencita -Bennet no parecía muy dado a dejarme pasar a verlo. 

-Por favor, solo será un minuto -le rogué poniendo cara de inocencia-. Solo quiero saber cómo se encuentra. 

Los penetrantes ojos azules del hombre me escudriñaron por al menos un largo y tenso minuto. Finalmente se encogió de hombros y asintió.

-Tú, cadete -llamó a un joven que se hallaba parado a unos metros más allá-. Llévala a ver a Di Steffano. 

El cadete asintió y me hizo una seña para que le siguiera. Mi mamá intentó ir tras de mí, pero el inspector la detuvo, lo cual agradecí. Tenía que hablar con Roberto a solas, tenía varias dudas que aclarar antes de dar por verdadero algo. 

Caminé tras el joven por un largo pasillo, hasta que llegamos a una ventana enorme. Miré a través de ella y me llevé una gran sorpresa al ver a Roberto allí. Estaba sentado tras una mesa de metal, con los codos apoyados sobre ella y la cabeza escondida entre las manos. La imagen me dio una sensación de fastidio y frustración por no poder sacarlo de allí rápidamente. 

-Él no puede vernos. ¿Verdad? -pregunté al cadete sin quitar la vista de es desmoronado Roberto. 

-No -levantó las cejas algo irritado, mientras me señalaba a la puerta junto a la ventana-, ¿vas a entrar?. 

Sin responder estiré la mano para tomar el pomo de la puerta y la abrí. En cuanto sintió que alguien entraba, Roberto alzó la vista y una sonrisa genuina se extendió por su rostro cuando sus ojos verdes se posaron sobre mí. 

-Caroline, ¿qué haces aquí? -cuestionó sorprendido. 

No pude evitarlo y corrí hasta él para rodearlo con mis brazos. Él aceptó mi muestra de cariño un tanto conmocionado. Enseguida me separé de él al recordar que el cadete podía vernos a través de la ventana-espejo. 

-¿Cómo estás? -quise saber. Tomé asiento frente a él, sosteniéndole una de sus manos entre las mías. 

-Bien, aunque no entiendo nada -admitió fijando su vista en la mesa-. ¿Cómo llegaste aquí?. 

-Me llamaron para interrogarme -le conté y frunció el ceño-. Y le he pedido al inspector que me dejara pasar a verte. 

-Lamento haberte metido en esto, nena -se disculpó acariciándome el rostro. 

Retiré la cara hacia atrás y él se me quedó mirando sin entender por qué lo hacía. 

-Nos observan -murmuré enganchando su mirada-. Y les he dicho que éramos solo amigos. 

-Ah, bien -masculló y se desprendió de mi agarre. 

-No quería complicarte más las cosas -aseguré viendo que se había enojado-. Me preguntaron sobre Carla -esto último se lo dije en un susurro casi inaudible. 

-¿Qué les dijiste? -preguntó interesándose por lo que fuera a decirle. 

-Que no sabía nada de nada -dije orgullosa de haber guardado el secreto. 

-¡Eres tonta! -se paró de un salto mientras gritaba y comenzaba a caminar desesperado de un lugar al otro-. Tendrías que haberle dicho todo. Ahora si lo descubren tú quedaras metida en todo esto. 

-Yo no sabía qué hacer -le recriminé dolida-. No podía gritar a los cuatros vientos un secreto en el que ni siquiera estoy incluida. ¿Y si eso te complicaba las cosas?, ¿de quién sería la culpa?. 

-Entonces debo felicitarte -dijo irónico, frenó y me lanzó una mirada furiosa-. ¿Qué sucederá ahora si se enteran de que tú sabias lo de Carla y que no dijiste nada?, ¿eh?. Creerán que eres mi cómplice. 

-¿Y qué?. Eres inocente -puntualicé enojada yo también. Yo trataba de ayudar y él me lo echaba en cara. 

-No me importa, no te quiero metida en esto -negó frustrado y se dejó caer en la silla nuevamente. 

-Pues, lo siento... -levanté mi barbilla y le miré directamente a esos ojos que me volvían loca-. Estoy metida en esto desde que me metí contigo. Ya no hay vuelta atrás. 

Me puse de pie demasiado indignada y dispuesta a marcharme, pero antes de dar ni siquiera un paso en dirección de la puerta, recordé para qué había ido a verle. 

-Roberto... -esperé a que me prestara atención-. ¿Qué sabes de tu madre?, ¿cuándo fue la última vez que tuviste algún contacto con ella?. 

-¿A qué viene eso? -exclamó abriendo bien los ojos. 

-Solo respóndeme, ¿sí? -se lo pedí seria, sin mostrarle ni plantearle mis conclusiones-. ¿Cuándo fue la última vez supiste de tu madre, Roberto?. 

-Hace muchos años -contestó rápidamente. 

-¡Mientes! -le reproché muy segura de mis palabras-. Confía en mí, dime la verdad. 

Roberto se volteó para no dar la cara, pero no se lo permitiría, giré alrededor de él para tenerlo de frente y le sostuve la mirada esperando una respuesta sincera de su parte.

5 comentarios :

Violeta dijo...

Oh! Stoy enganchada a este cuento!

Otra cosa Dulce, x superar los 100 seguidores, he creado una entrada nueva sobre mi, con etiqueta y todo, woow, Jeje... M gustaría q t pasaras y m digas q t parece.

Bss de color Violeta...

Van der Banck dijo...

Me he pasado por acá y me ha interesado bastante unirme como socia.
Tengo un blog pero lo abandoné hace mucho tiempo y actualmente sólo subo mis historias a Foros DZ. Me gustaría entrar y compartir con las demás :D

Déborah F. Muñoz dijo...

pobre Roberto...

Angy J. W. dijo...

O.O la asesina es la madre?? Y como lo ha descubierto Caroline? Que estará pasando? Espero la continuación! :)

Cali dijo...

Aisshh!! Que bonitoo!! Seguro que es inocente. ¡Yo quiero un beso!
;D

uno para vosotras todas!

Cali